Foto: Los Andes
Hace treinta años, la Selección Argentina llegó al momento más brillante porque se consagró campeón del Mundial de México de 1986. Envuelto en un clima de críticas feroces por sus actuaciones, el equipo albiceleste se preparó con varios días de antelación para la Copa del Mundo.
En su primer encuentro de la fases de grupo, el conjunto dirigido por Carlos Bilardo derrotó por 3 a 1 a Corea del Sur. En el primer tiempo, a los 5 minutos, Jorge Valdano abrió el marcador, tras un centro de Diego Maradona. Más tarde, a los 18, Oscar Ruggeri con un cabezazo, marcó el segundo tanto. En la segunda etapa, el seleccionado argentino aumentó las cifras, por intermedio de Valdano, tras otra habilitación de Maradona. Finalmente, el gol del descuento lo concretó Park Chang-Sun.
En su segundo enfrentamiento, la formación argentina igualó 1 a 1 frente a Italia. La escuadra azurra se puso en ventaja por el tanto de Alessandro Altobelli, de penal (Jorge Burruchaga tocó ingenuamente la pelota con la mano adentro del área). A pesar de esa desafortunada jugada, el combinado albiceleste llegó al empate a los 33 minutos del mismo período por obra y gracia de Maradona.
Luego, en el tercer compromiso ante Bulgaria, el elenco de Bilardo anotó el primer tanto, a través de Valdano, a los tres minutos de la primera parte. Durante el desarrollo del juego, Diego Maradona apareció en escena: envió un centro para que Burruchaga convierta el 2 a 0 final. De esta manera, la Selección Argentina se clasificó a los Octavos de Final, sin pasar sobresaltos.
En esa instancia, enfrentó a Uruguay, reeditando una vez más el "clásico del Río de la Plata". El conjunto albiceleste superó por 1 a 0 al seleccionado de Enzo Francescoli, entre otros, con gol de Pedro Pablo Pasculli. Después de vencer a la Celeste, el combinado argentino jugó por los Cuartos de Final contra Inglaterra.
Fue un día inolvidable para todo el público que estaba en el estadio y que lo miró por televisión ya que Maradona convirtió dos tantos (uno que es recordado como "la mano de Dios" y el otro por una jugada antologica porque dejó a cinco jugadores por el camino). El gol del descuento lo estableció Gary Lineker, tras un centro de John Barnes. Al final, el seleccionado argentino ganó por 2 a 1 y avanzó a una de las semifinales de la Copa del Mundo.
Bélgica fue el rival y tampoco pudo sostener su fortaleza debido a otra gran actuación de Diego Maradona, quien anotó dos goles de muy buena factura. Por esta victoria, la alineación de Carlos Bilardo se clasificó a la Final para encontrarse con Alemania. A los 22 minutos del primer tiempo, José Luis Brown de cabeza abrió el marcador para el equipo albiceleste.
Luego, el complemento comenzó de la mejor manera porque Jorge Valdano finalizó un contraataque comandado por Héctor Enrique para establecer el 2 a 0. El encuentro ganó en dramatismo porque Rummenigge, también con un cabezazo, marcó el descuento. Finalmente, el golpe de nocaut para que el seleccionado alemán llegué al empate lo concretó Voller.
El partido se había complicado mucho, sin embargo apareció el toque mágico de Maradona para que Jorge Burruchaga anote el 3 a 2 final, que lo depositó en lo más alto. La Selección Argentina cumplió su sueño y obtuvo su segundo Mundial. Fue su ultima Copa del Mundo que se consiguió y a pesar de que pasaron treinta años, se sigue valorando y disfrutando como ese lejano 29 de junio de 1986.
Por Diego Bentivegna
Twitter: @bentidiego
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