Torneo Clausura
El Cuervo no aprovechó la ventaja ante el Globo y finalizó el clásico 0-0 en el Nuevo Gasómetro.
El clásico entre San Lorenzo y Huracán fue una montaña de emociones desde el primer minuto. El Globo, en los primeros instantes del primer tiempo, superó al Ciclón, que casi no había pasado la mitad de la cancha.
Entre rebotes y despejes, a los 26 minutos del primer tiempo, un codazo de Giménez sobre Perruzzi dentro del área de San Lorenzo provocó su expulsión por parte del árbitro.
Después de la decisión, se desató la euforia de la hinchada de San Lorenzo, que lo celebró como un gol, alentando febrilmente.
Los últimos minutos del primer tiempo fueron intensos por parte del Cuervo, que aprovechaba la ventaja de tener un jugador más y el gran apoyo de la gente, que saltaba y cantaba a todo pulmón. Sin embargo, no lograron alterar el marcador.
En el segundo tiempo, San Lorenzo buscó el arco rival: Reali, Cerutti y Baez generaron chances que rozaban la gloria, pero la defensa y el arquero de Huracán estaban bien protegidos.
A los 7 minutos, el VAR anuló un penal a favor del Cuervo. Reali recibió la pelota y Nervo trató de cortarla, pero un offside previo a la falta dentro del área hizo que la jugada no se cobrara. Sin embargo, la intensidad no decayó: cada acción se disputaba como la última, y cada rebote era el latido de desesperación de hinchas y jugadores.
Los cambios de ambos equipos dinamizaron el partido: Tissera se perdió un gol a los 34 minutos; la pelota rozó el palo derecho cuando estaba frente al arquero.
A los 42 minutos, Huracán tuvo un tiro libre que desató el enojo de la gente de San Lorenzo, que se levantó y cantó: “¡Movete, Cuervo, movete!”. En el minuto 44, tiro libre para el Ciclón ejecutado por Facundo Gulli, que terminó en las manos del arquero del Globo.
Finalmente, el clásico concluyó sin goles, pero con la emoción y el esfuerzo de ambos equipos.
Por: Sofía Sedeño.
Foto: Liga Profesional de Fútbol.
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